Tecnología: Fabricar células de combustible a una centésima parte de su costo habitual
El catalizador desarrollado por Kisailus y sus colegas está hecho por nanofibras de carbono porosas que tienen incorporado un compuesto hecho de un metal relativamente abundante, como el cobalto, que es más de 100 veces más barato que el platino.
Las células de combustible, que ya son empleadas por algunos fabricantes de automóviles, ofrecen ventajas claras sobre las tecnologías convencionales de combustión, incluyendo una mayor eficiencia, un funcionamiento más silencioso y menores emisiones contaminantes. Las células de combustible de hidrógeno solo emiten agua.
Como las baterías, las células de combustible son dispositivos electroquímicos que incluyen un electrodo positivo y uno negativo con un electrolito en medio. Cuando el combustible de hidrógeno es inyectado en el ánodo, un catalizador descompone las moléculas de hidrógeno en las partículas cargadas positivamente (los protones) y en las partículas cargadas negativamente (los electrones). Los electrones son dirigidos, a través de un circuito externo, hacia el punto deseado, en el cual efectúan un trabajo útil, como por ejemplo energizar un motor eléctrico, antes de volver a reunirse con los iones de hidrógenos cargados positivamente y con oxígeno para formar agua.