Ciencia: Otra forma de estudiar el cerebro

Marcos Cuadrelli es alumno investigador. Hace 2 años, junto a un equipo de cinco investigadores conformado por cuatro profesionales (tres médicos y un biólogo) y dos estudiantes, iniciaron esta investigación que finalizaría con la presentación de un póster en el Congreso Internacional de Diagnóstico por Imágenes en Brasil y que forma parte del material que usará para realizar un atlas.

Marcos comenta que su pasión por la neuroanatomía fue heredada del profesor Leopoldo Luque, con quien comenzaron buscando líneas de investigación para presentar en la Facultad, siendo una de ellas la relacionada a la tractografía. Luego de iniciar la búsqueda de marco teórico, estudiando fuentes francesas y rusas, papers y journals de neurocirugía, Marcos había logrado avanzar en la propuesta de investigación: observó que no existía en toda la teoría reunida unión entre la tractografía y el conocimiento anatómico del cerebro. La investigación cubre el hueco bibliográfico existente a la hora de profundizar la formación de los estudiantes de medicina dentro del estudio por imágenes del cerebro, ampliando el conocimiento neuroanatómico en conjunto con su relación imagenológica, dentro del área de la tractografía DTi.

El alumno de Medicina podrá mejorar la manera en que estudia, a través de las imágenes tractográficas, las conexiones del encéfalo mostrando, mediante un software, la dirección de la difusión de moléculas de agua utilizando diferentes colores dependiendo el eje que atraviesa. Esta técnica muestra cómo se observan estas estructuras, tomando conciencia de lo que están viendo, no basándose en imágenes figurativas sino obteniendo conocimiento para poder realizar un diagnóstico certero.

Asimismo, esta investigación es de utilidad para los médicos especialistas en diagnóstico por imágenes, dado que pueden unir la imagen que observan en el monitor con la realidad anatómica para lograr una profundización de los conocimientos.

La tractografía es una técnica operador dependiente, que se considera de vital importancia a la hora de realizar estudios en el sistema nervioso central humano, dado que muestra cómo es la conexión que existe en el cerebro y permite conocer una situación patológica. Al ser utilizada para diagnóstico y tratamiento de enfermedades neurodegenerativas, como el Alzheimer y epilepsia, el profesional accederá a otro tipo de interpretación, más especializada.

En definitiva, según Marcos, el cerebro tiene la última palabra siempre, por ello es importante para prevenir, diagnosticar y realizar el mejor tratamiento que se conozca en profundidad su anatomía. (Fuente: Argentina Investiga)